lunes, 28 de febrero de 2011

Cádiz, 19 de septiembre de 1868

" Españoles: La ciudad de Cádiz puesta en armas con toda su provincia (...) niega su obediencia al gobierno que reside en Madrid, segura de que es leal intérprete de los ciudadanos (...) y resuelta a no deponer las armas hasta que la Nación recobre su soberanía, manifieste su voluntad y se cumpla. (...)
Hollada la ley fundamental (...), corrompido el sufragio por la amenaza y el soborno, (...) muerto el Municipio; pasto la Administración y la Hacienda de la inmoralidad; tiranizada la enseñanza; muda la prensa (...). Tal es la España de hoy(...).
 Queremos que una legalidad común por todos creada tenga implícito y constante el respeto de todos. (...)
 Queremos que un Gobierno provisional que represente todas las fuerzas vivas del país asegure el orden, en tanto que el sufragio universal echa los cimientos de nuestra regeneración social y política.
Contamos para realizar nuestro inquebrantable propósito con el concurso de todos los liberales, unánimes y compactos ante el común peligro; con el apoyo de las clases acomodadas, que no querrán que el fruto de sus sudores siga enriqueciendo la interminable serie de agiotistas y favoritos; con los amantes del orden, si quieren ver lo establecido sobre las firmísimas bases de la moralidad y del derecho; con los ardientes partidarios de las libertades individuales, cuyas aspiraciones pondremos bajo el amparo de la ley; con el apoyo de los ministros del altar, interesados antes que nadie en cegar en su origen las fuentes del vicio y del ejemplo; con el pueblo todo y con la aprobación, en fin, de la Europa entera. (...)
Españoles: acudid todos a las armas, único medio de economizar la efusión de sangre (...), no con el impulso del encono, siempre funesto, no con la furia de la ira, sino con la solemne y poderosa serenidad con que la justicia empuña su espada. ! Viva España con honra!
Cádiz, 19 de septiembre de 1868.- Duque de la Torre, Juan Prim, Domingo Dulce, Francisco Serrano, Ramón Nouvillas, Rafael Primo de Rivera, Antonio Caballero de Rodas, Juan Topete".

El texto que posteriormente vamos a comentar se trata de un escrito con carácter político y social, redactado según las bases liberales y los problemas de España para conseguir un cambio en el país. En el podemos distinguir cinco partes diferenciadas por su contenido. La división que nos encontramos es la siguiente: un primer párrafo en el que expone las intenciones por las que van a comenzar la revolución; en el segundo nos enumera algunos de los problemas que en ese momento se dan en España y que promueven la revuelta; los dos siguientes explican lo que quieren conseguir con este movimiento, es decir, una “regeneración política y social” en base a las ideas liberales; seguidamente nos presenta los grupos que apoyan y se han unido a defender esta idea, y las bases sociales en las que se apoyan; para finalizar, en las últimas líneas se realiza un llamamiento al pueblo para que se una a la revolución, utilizando si cabe las armas para hacer justicia al país, nunca por venganza. Esta carta fue leída en Cádiz el 19 de septiembre de 1868 por Juan Topete, uno de sus redactores junto a muchos otros como Juan Prim y Francisco Serrano.

Esta situación se dio durante el reinado de Isabel II(1830-1904), un periodo de treinta y cinco años en las que hubo continuos enfrentamientos entre absolutistas y liberales debido a su subida al trono, respaldada por los liberales a pesar de la oposición de los absolutistas, por ello a lo largo de estos años se irá asentando el sistema liberal en España.
El reinado de Isabel II se fragmentó en cuatro etapas, esta carta, en concreto corresponde a la ultima “La unión liberal(1.858-1.868)” en la que finalmente consiguen imponer sus bases.
los años de gobierno por parte de Isabel II fueron continuos momentos problemas militares, debido a las guerras carlistas; políticamente se veía una inestabilidad del sistema y democrática, enfrentamientos entre moderados y progresistas y económicamente se sufrió un catastrófico atraso, en España se seguía con una producción agraria de muy baja producción debido a la casi inexistente industrialización que se había desarrollado, por ello se intento producir un cambio en este aspecto con las desamortizaciones.
La carta que estamos comentando se refiere, en cierta modo, a este periodo de desamortizaciones. Esto consistía en arrebatar las tierras a los “manos muertas”- aquellos propietarios que solo las poseen por mantener un estatus social, por lo que no las trabajan(iglesias, municipios)- para subastarlas entre el resto de ciudadanos; el dinero recaudado se utilizaría para cubrir los gastos que habían producido las guerras carlistas, y así, estos nuevos propietarios se ocuparían de las tierras y poco a poco se empezaría a salir del bache que había producido este reinado. Pero las cosas no fueron como se esperaban – que se empezasen a usar las técnicas agrícolas que utilizaba Inglaterra, el país más industrializado del momento- y todos estos movimientos desamortizadores no tuvieron los efectos esperados.
En este escrito es importante destacar el grito “¡¡VIVA ESPAÑA CON HONRA!!” con el que se sublevó Topete en el momento que leía el escrito en la bahía d Cádiz mientras la gente estaba pendiente de él, como reclamo contra el Gobierno de Madrid.
Todo esto desencadeno el final esperado, Isabel II y su familia partieron a Francia el 12 de Septiembre, ya que las tropas protectoras de la reina habían sido derrotadas.
Además se produjeron importantes reformas: libertad de imprenta, sufragio universal masculino, democratización de los ayuntamientos. A la vez se convocaron elecciones a Corte, que acabaron con la victoria de los liberales progresistas. 

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